15 feb 2019

Que caiga...

Que caiga la noche sobre mi cuerpo enamorado
de una mujer de cabellos castaños y piel de nieve;
que caiga la noche ataviada de su perfume concatenado
a esta ilusión palaciega que se cierne en pliegues.

Que caiga la furia invernal sobre mi alma oscura
cuando ella se ausenta, y mi vida pierde la brújula,
extravía el camino; que caiga del árbol esta fruta madura
que ansío morder como un despiadado ser lleno de gula.


No hay comentarios:

Publicar un comentario